Primer partido de la temporada y primera victoria. En estos casos siempre se dice que el resultado es lo de menos, pero de cualquier forma, no es lo mismo irse al hotel con un 0-4 a irse con un 1-1, por ejemplo.
Pero como es el primer partido y entre el cansancio y las ausencias, ni el once inicial ni el de la segunda parte serán titulares al completo en ningún partido, me voy a centrar en analizar a los nuevos que jugaron: Squilacci, Acosta y Romaric.
- Squilacci: Me gustó mucho. Es el útimo que ha llegado y casi no ha tenido tiempo de conocer a sus compañeros, pero se nota su saber estar, su contundencia, su clase. Si le respetan las lesiones se va a convertir en eje de la defensa del Sevilla, que este año no echará tanto en falta a Javi Navarro.
- Acosta: Se le vieron cosas, pero aún está muy verde. O a lo mejor es simplemente que está en pretemporada. Se me parece más en su juego a Aguero que a Messi, pero de cualquier forma, tal como dice él, es Acosta. Lo de su falta de puntería no es broma, tuvo una y la mandó a las nubes. Pero sí hizo muy bien lo que sabe. En un contrataque eléctrico dejó el primer gol en bandeja a Luís Fabiano, que antes de marcar quiso adornarse. Cuando mejore el físico puede convertirse en un buen fichaje.
- Romaric: Pedazo de pierna izquierda y muy intermitente en su juego. Eso no me preocupa hoy, porque está muy cansado de tanto esfuerzo. Espero que cuando empiece la temporada juegue al mismo nivel que los primeros minutos que jugó. Sabe lo que hace cuando le llega el balón y siempre lo hace fácil. Me gustó.
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