Las eliminatorias entre equipos tan iguales, se deciden por detalles. Detalles como el fallo de Adriano. Detalles como el fallo del juez de línea en el segundo gol sevillista. Detalles como el fallo de Romaric en el tercer gol valencianista y la mala suerte del rebote en ese mismo gol.
Tres detalles en contra y dos a favor. Igual que el resultado.
Pero más allá de los detalles, el Sevilla FC ha merecido mucho más. Ha sido mejor y debería haber sacado un mejor resultado.
Debemos ser optimistas de cara a la vuelta. El Ramón Sánchez Pizjuán tiene que ser el de las grandes noches. El de la semifinal que nos cambió la vida. El de la victoria 3-1 al Arsenal. El de la remontada al Panathinaicos.
Cualquiera de ellos me vale. Nos vale ganar casi por cualquier resultado, al menos de los normales.
Tenemos desventaja en el marcador, pero estoy seguro que lucharemos hasta el final.
Pero una cosa tenemos que tener clara. El Valencia también puede marcar, y no creo que se resuelva la vuelta 1-0 ó 0-0. Creo que va a haber más goles. 2-1 ó 1-1. Por ahí andará la cosa.
Un breve lapsus ante el Racing, aunque importante, y a por los valencianistas.
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