Si hace una semana fueron protagonistas de la victoria Manolo Jiménez y Kanouté, el primero por su acierto en los cambios y el segundo por su espectacular partido, esta jornada en la que el equipo a vuelto a ganar, consiguiendo alcanzar los 38 puntos en 19 jornadas (la famosa media inglesa), también hemos tenido dos protagonistas principales.
El primero Javi Varas. Hacía mucho tiempo que no jugaba en liga un portero de la cantera y mucho más nacido en Sevilla. Es una alegría y más cuando realizó varias paradas de mérito, demostrando el por qué de la confianza que ha depositado en él Manolo Jiménez.
Puede haber portero para rato. Espero que tenga paciencia. Tiene delante al ejemplo más claro. Palop se llevó mucho tiempo a la sombra de Cañizares. Si aprende de él, tendrá paciencia y recogerá el testigo del valenciano. Eso lo deseo.
Por otro lado, Mosquera. El colombiano, marcado durante toda su historia sevillista por el precio de su fichaje (muy alto para el rendimiento que ha ofrecido) y la persecusión de la prensa sevillana, estuvo a punto de marcharse hace unos días, desesparado por el trato, pero se ha quedado, al menos, hasta hoy, y se apuntó al partido de hoy como lateral derecho, demostrando su profesionalidad. Y no sólo eso, sino que firmó su mejor partido como sevillista, marcando incluso un golazo que fue anulado.
Enhorabuena a los dos y al resto de jugadores, que llevan unas jornadas devolviéndonos esa sonrisa que habíamos perdido.
El miércoles, los cuartos contra el Valencia. Ánimo.
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