Ésta es mi calificación de la temporada.
Y lo es porque creo que en global de todo lo que ha sido y de las expectativas que tenía, no puedo valorarlo ni siquiera como notable.
En la liga, hemos estado muy bien, repitiendo clasificación por tercer año a la Champions. La nota puede ser de Notable (8). No puede ser sobresaliente porque al final hemos quedado 4º y porque para ser sobresaliente o incluso MH debíamos haber quedado 2º que fue nuestro puesto gran parte de la temporada o líderes.
Es cierto que hemos sido la única alternativa a la liga durante la mayor parte de ésta, pero es que a mi entender teníamos equipo para ello. Pero al final nos hemos caído estrepitosamente (los motivos son varios y tendrá que analizarlo Lopetegui, Monchi y Castro) y no hemos podido ni mantener el segundo puesto que hubiera sido un buen colofón.
En Copa la nota sería un 6, porque hemos pasado las eliminatorias antes equipos inferiores y en cuanto nos tocó un equipo de primera, nos eliminó, con el añadido de ser el eterno rival. En nuestra defensa diré que llegamos muy justos de efectivos a esa eliminatoria y con un niño en la portería y que aun así hicimos una digna eliminatoria, pero en cualquier caso no puedo ponerle más nota.
En Europa hemos suspendido. Primero caímos en Champions en un grupo de nivel medio bajo donde debíamos haber pasado sin problemas. Y después, en la Europe League, jugándose la final en nuestro estadio debimos haber dado algo más y no caer ante un equipo de nivel medio de la liga inglesa.
Creo que haber llegado a la final de la EL era factible y también hubiera mejorado mucho la notal final.
En definitiva no puedo dar más de un 6 a una temporada que inicié con unas expectativas espectaculares y que por las lesiones, el COVID, el fútbol que desarrollaba el Sevilla, la falta de acierto de jugadores claves, etc. se fue apagando hasta que finalmente se quedó en una temporada mediocre.
Y resulta que el equipo está a un nivel que haciendo una temporada mediocre se clasifica vía liga a la Champions y su portero consigue el Zamora por primera vez en la historia.
Eso me hace ser optimista para la que viene, aunque sea volviendo a método de vender para crecer que tan poco nos gusta a los sevillistas, pero que entendemos que es la única vía que tenemos.
Ya se ha ido Diego Carlos, para mí el mejor defensa que teníamos. Y Koundé está a punto de irse. Con la marcha de los dos centrales que han formado la mejor pareja de la liga española durante dos de los tres años que han jugado juntos, así como la incertidumbre del rendimiento que puede dar Fernando tras lesión, se rompe la fortaleza que nos ha mantenido arriba estos años.
Mucho trabajo tiene Monchi. Tres centrales (contando la salida segura de Koundé), dos de ellos para ser titulares, un mediocentro defensivo que pueda disputar el puesto a Fernando, un volante ofensivo que mejore el rendimiento de Oliver Torres y que siente en el banquillo al Papu y un delantero centro de primer nivel, Raúl de Tomás sería una posibilidad.
Esperemos que Monchi acierte y el año que viene podamos como mínimo mantener el cuarto puesto (Betis y Villarreal apretarán mucho para bajarnos, más algún otro que se sume) y que nos permita pelear la Copa y llegar lejos en Champions, donde ya se tiene que poner el objetivo fijo de llegar a Cuartos y luego soñar como lo ha hecho el Villarreal.
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