En todos los sentidos, en lo que a nosotros se refiere.
Por un lado, en las cuestiones organizativas, este tipo de torneos tienen mucha aceptación en Asia, ávidos de ver buen fútbol, o al menos, equipos de primer nivel aunque sea en pretemporada. Pero organizar un torneo de este tipo en Europa, y más concretamente, en España, es una locura. Y si encima lo organizas en pleno mes de julio (que hoy por hoy es el mes de agosto de nuestros padres, es decir, cuando todos nos vamos de vacaciones) el resultado es el que hemos visto en los partidos disputados en Sevilla, entradas más que pobres. En Madrid sí hubo una buena entrada, pero esa buena entrada no tiene nada que ver con la Peace Cup, sino con la presentación en el Bernabéu de Cristiano Ronaldo.
Y todavía más razones para el fracaso, y en eso los encargados del marketing del torneo han demostrado un conocimiento vago de la situación de los bolsillos españoles y de la disposición a gastar de éstos. Si ya el año pasada, cuando jugamos la champions, la entrada en el Sánchez Pizjuán fue pobre en algunos partidos debido a los altos precios, cómo se os ocurre poner precios champions para un torneo de verano, con todo el mundo en la playa. Es algo que nunca entenderé.
Y si en lo organizativo ha sido fracaso, en lo deportivo tampoco lo está siendo mejor. Partidos muy malos, y es lógico, pues los equipos de cierto nivel que están en el torneo tienen puestas sus miras en la preparación para la temporada que empieza en agosto y no se toman el torneo tan en serio, o simplemente, no pueden (y más si por la Copa Confederaciones u otros torneos de selecciones, tienen jugadores importantes que se han incorporado más tarde). En concreto, la participación del Sevilla FC ha sido muy pobre. Buen partido con derrota ante la Juve y mal partido y empate en casa ante un equipo de tercera división española pero con bandera coreana.
Pero, como dice Del Nido, no podemos sacar conclusiones ya. Tampoco estoy de acuerdo de sacarlas después del Carranza. El año pasado esperamos hasta final de temporada para sacar las conclusiones, no voy a sacarlas este año tras el Carranza por muy bien o mal que salga.
Estoy de acuerdo con que la plantilla esté cerrada si así lo creen los técnicos, pero no estoy de acuerdo con que si durante los próximos partidos vemos carencias se podría ampliar. Esto no tiene sentido. El conocimiento de la plantilla y la estimación de necesitar refuerzos o no, no puede quedar a expensas del resultado de los partidos de pretemporada. Estoy seguro que Monchi y Jiménez saben perfectamente a día de hoy dónde pueden tener carencias e independientemente de cómo resulte la pretemporada, deben actuar.
Por cierto, el de La Sexta estará que se sube por las paredes, pues ya daba como favorito para la final al Real Madrid y tras el empate ante el equipo malo del grupo (aunque el grupito que le tocó, no te digo nada), se le ha complicado la clasificación.
En fin, que el verano sigue y aún es largo. Vamos a seguir entranándonos que cuando hay que estar finos es al comienzo de la temporada.
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