La desgracia se ha cebado con la joven promesa sevillista y tras cinco minutos en el campo, una semana después de su reaparición tras 10 meses en el dique seco, tuvo que ser retirado en camilla. Según la página oficial del Sevilla FC, tiene afectado la tibia y el peroné de la pierna contraria a la que se lesionó el año pasado. Si se confirman los peores augurios, el chaval se llevará otra temporadita fuera de los terrenos de juegos.
La verdad es que yo no soy de creer en maleficios, pero, ¿será verdad lo de la maldición del lateral izquierdo?. No, no quiero caer en esas tonterías. Se trata, simplemente, de mala suerte, de muy mala suerte.
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