domingo, 23 de diciembre de 2007

Despedirse como merecía

El año 2007 no podía terminar de otra forma. Hubiera sido injusto si no hubiésemos sido capaces de ganar un partido que se puso cuesta arriba con el empate del Racing.
Pero esta vez, el Sevilla que acudió a la cita fue el de Champions y, no sin esfuerzo, logró imponerse al Racing por 4-1.
Gran partido del equipo en general, pero sobre todo de Mosquera, Maresca y Capel. El primero va a conseguir, si no lo ha conseguido ya, que me coma mis palabras. Partido impresionante del colombiano, excelente en la anticipación y mejor en el cruce. Perfecto el partido del colombiano que se ha asentado en el equipo y que va a conseguir ser un baluarte en la defensa.
Y gran partido también de Maresca que asumió la responsabilidad de llevar el peso del partido, dándole rapidez cuando hacía falta, parando el juego cuando así lo requería, desahogando, incluso atascando si eso era necesario para sacar la pelota jugada.
Por último, destacaré a Capel (jugador que sigue siendo santo de mi devoción), pero que está creciendo a una velocidad impresionante y que como no se pierda, va a convertirse en un jugador de élite mundial.
Buen partido por tanto del Sevilla FC, que se coloca a 3 puntos de la UEFA y que al que seguro le vendrá bien el parón para volver a ser el equipo que todos queremos.
Lo único malo del partido, la expulsión de Daniel Alves, que salvo que el Comité de Competición o el de Apelación le eviten, se perderá el derbi.
Desde luego, si ninguno de los dos comités le quitan la tarjeta, serán ya demasiados atropellos y habrá que pensar en tomar medidas, por parte de todos, como hemos hecho siempre que nos han atropellado.

1 comentario:

Unknown dijo...

Lo que debería hacer el presidente, una vez vistas las imágenes por televisión, es pedir una sanción al colegiado de ayer. Puede que un arbitro, malo donde los haya, pite mal, que se equivoque, que nos robe, puede ocurrir de todo, pero lo que yo no aguanto, y creo que ningún sevillista estaría por la labor, es que se cachondee en mi cara.
Ayer se equivocó con Alves, le sacó tarjeta, hasta ahí bien, pero es que se llevó un puñado de segundos increpando y gritándole a un jugador que se está doliendo en el suelo.
Mi alma, tú te puedes equivocar, pero te tienes que esperar a que se levante y entonces le sacas la tarjeta. Un arbitro siempre tiene que mantenerse en su sitio. Si te da un calentón, pues como los jugadores, a la ducha y que no pite durante unas cuantas de jornadas.
Espero que le quiten la tarjeta, pero ya veremos, conociendo a los comités lo mismo le echan dos partidos por no levantarse antes.
¿A ver cuánto le cae ahora al Kun Agüero? que eso sí es agresión y no la de Luis Fabiano.
Quillo, nos vemos.