Después de la victoria del Atlético de Madrid ante el Recreativo de Huelva sólo nos queda ganar. Mis cuentas, desde que acabó el partido contra el Murcia son ganar los cuatro partidos que nos quedan y esperar que el Atlético sólo sea capaz de ganar 2. El primero de ellos lo ha ganado esta noche, pero también es verdad que es el más, en principio, fácil que tenía.
Nos queda una sola bala en la recámara, contra el Español fuera y el Deportivo en casa. Dos partidos difíciles, pero después de ver el paupérrimo partido que ha hecho el Depor en Zaragoza, más vale que pinche en Barcelona, ante el Español. La victoria del Zaragoza, además de mantener al Depor a los mismos puntos de ventaja, ha servido para que el Valencia tenga que seguir sufriendo y lo suyo es que llegue al último partido de liga metido en el agujero, porque si llega a la última si estar salvado, el partido Valencia-Atleti será de infarto.
Pero todo esto no servirá de nada si no ganamos los cuatro partidos que quedan y hay que empezar a ganar mañana, ante el Valladolid.
Que somos superiores, está claro. Que tenemos que ganar, también. Pero sólo hay que fijarse en el partido de hoy entre Zaragoza y Depor para comprender lo complicado que es fútbol. Ocasiones de gol increíbles las falladas por los maños (el mismo equipo que llegó dos veces a nuestra portería y nos marcó dos goles) y al final, cuando el empate parecía seguro, marcan en una jugada a balón parado y casi de forma tonta. Increíble.
Por eso mañana hay que luchar desde el minuto 1 al 94, 95 o los que haya. Todo el partido la grada tiene que ser un infierno para los vallisoletanos. Tenemos que ganar el partido entre todos y desde luego yo, cumpliré mi parte.
Si todos la cumplimos y somos capaces de ganar, seguiremos soñando.
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